El Fondo colabora también en un proyecto destinado a solucionar los problemas que enfrentan las mujeres que se ocupan de forma voluntaria de los enfermos de SIDA durante su enfermedad o en su fase final.
Pero él debía conocer la razón de estos cambios, porque se cuidaba muy bien de que nadie los notara, y de que nadie oyera las canciones de navegantes que a veces cantaba bajo las estrellas.