El periodista dedujo que los jóvenes se habían ido a los pueblos de alrededor o a la ciudad para encontrar trabajo en varias esferas, pero se sorprendió al averiguar que sencillamente habían muerto de SIDA.
En un primer momento el Gobierno pareció sorprendido con los ataques, pero aparentemente no estaba en condiciones de contraatacar ni al parecer tampoco estimó en un primer momento que la rebelión fuese una situación militar grave.
En la medida que fuimos trabajando en Hombres Tejedores había palabras comunes, sensaciones comunes, miedos comunes… y eso fue lo que me voló la cabeza.
La primera toma de contacto con la discapacidad yo aluciné porque era lo que quería, lo que yo buscaba, era unir la danza con esta diferencia de energías y de cuerpos que me parecía tremendamente hermoso.
Bailaba con más gracia y más brío que los africanos de nación, cantaba con voces distintas de la suya en las diversas lenguas de África, o con voces de pájaros y animales, que los desconcertaban a ellos mismos.