Se mantienen registros suplementarios para la gestión de los bienes no fungibles valorados en el equivalente en dólares de los Estados Unidos calculado con arreglo al tipo de cambio vigente en la fecha de la compra.
La mayoría de los reclamantes facilitaron pruebas de la existencia, la propiedad y el valor de las existencias perdidas al proporcionar copias de las cuentas comprobadas de la empresa, facturas originales de compra y otros documentos, como pólizas de seguro.
Afirmaban, además, que no se les pagaba con dinero efectivo, sino con vales que sólo servían para comprar jamón de Virginia en los comisariatos de la compañía.