Es importante asistir, saber, conocer sus derechos, exigir sus derechos, saber que en detención los agentes de inmigración les puede mentir para obligarle deportar a sí mismo.
Por eso, dicen, es crucial que tanto la Corte como sus funcionarios puedan desempeñar las funciones vitales que les confiere el Estatuto de Roma sin verse obstaculizados por presiones, injerencias o intimidaciones de ningún tipo.