Sierva María vio la deflagración dorada y oyó la crepitación de la leña virgen y sintió el tufo acre de cuerno quemado sin que se le moviera un músculo de su rostro de piedra.
Si bien se supone que buscaron aislar esta parte del resto del submarino, se cree que este problema produjo una deflagración por la acumulación de hidrógeno.
De esta forma, el temporal eliminó la posibilidad de ir a la superficie para tratar de solucionar los problemas, y cuando estaban sumergidos es que se produjo la deflagración fatal.
Los datos preliminares indican que el ataque comenzó con la detonación de varios explosivos que causaron decenas de víctimas, entre ellas mujeres y muchos niños, ya que las deflagraciones se produjeron cerca de una zona de colegios y otras infraestructuras civiles.