Algo de desperdicio sí llega hasta allá y es descompuesto en el intestino delgado por ácido biliar, produciendo una masa babosa, pegajosa y verdosa, llamada meconio.
Entre las damas había dos de gusto pícaro y burlonas, y, con ser muy honestas, eran algo descompuestas, por dar lugar que las burlas alegrasen sin enfado.
Su hermana Grete sentía mucho aprecio por él y por eso se encargó de alimentarlo con comida descompuesta, que era lo único que ahora le apetecía comer.
No andes, Sancho, desceñido y flojo; que el vestido descompuesto da indicios de ánimo desmazalado, si ya la descompostura y flojedad no cae debajo de socarronería, como se juzgó en la de Julio César.