Camboya ha pasado una nueva página de su historia al dejar atrás, con firmeza, la oscuridad y las tragedias del pasado reciente y ha emergido en la nueva alborada de su futuro.
Desde el punto de vista económico, aún no ha emergido el momento de crecimiento en los diversos países del mundo y continúa la presión de que se impongan limitaciones sobre ciertos productos.