No hay que tener miedo a equivocarse pero para evitar que esto se repita hay que identificar el origen, ya que en muchos casos viene de una traducción directa de tu lengua materna.
Aconsejamos a Canadá que no siga equivocándose, sino que ponga de inmediato en libertad a la alta ejecutiva y proteja efectivamente sus legítimos derechos e intereses.
Veréis cómo nos vamos a divertir con aquel pequeño: le marearemos a preguntas y veremos qué es lo que contesta, que no dejará de equivocarse lo suficiente para que nos haga pasar un buen rato.
Pues, básicamente, todo se trata de probar, probar y probar: equivocarse, ser curioso y aprovechar la red para ver ejemplos de buenos diseños web y procurar seguir esos ejemplos, es lo mejor que se puede hacer.