Los pesantrens han abierto sus puestas a huérfanos y otros niños afectados por la tragedia para ofrecerles refugio y permitirles continuar su educación.
A muy corta edad, quedó huérfano de padre y de madre, lo que no impidió que recibiera una buena educación, por algo era sobrino de Alfonso X el Sabio .
Un sacristán viejo y una niña huérfana de catorce años, ambos mandingas conversos, eran los ayudantes en la iglesia y en la casa, pero no hacían falta después del rosario.
No me puedo persuadir que haya hoy en la tierra quien favorezca viudas, ampare doncellas, ni honre casadas, ni socorra huérfanos, y no lo creyera si en vuesa merced no lo hubiera visto con mis ojos.