Para darles apenas un ejemplo, en el Perú, el riguroso entorno local, caracterizado por suelos salinos agotados y elevadas altitudes, ha sido en general la causa del fracaso de muchos cultivos.
En humanos el proceso se conoce como preservación y reanimación de emergencia y consiste en enfriar rápidamente el cuerpo a unos 10 grados al reemplazar la sangre del paciente con un líquido salino frío.