Ping tuvo la enorme responsabilidad de negociar las reformas de las Naciones Unidas que adoptaron nuestros Jefes de Estado o de Gobierno el viernes 16 de septiembre.
Su Presidencia marca el inicio de la fase de aplicación de las principales decisiones relativas a la reforma adoptadas por nuestros Jefes de Estado o de Gobierno.
Igualmente, transmitimos nuestro pésame al jefe de Estado de Mónaco y a su distinguida familia por el fallecimiento del Príncipe Rainiero, así como al pueblo de Mónaco.
En la Declaración del Milenio, los Jefes de Estado y de Gobierno “propugnaron un sistema comercial y financiero multilateral, abierto, equitativo, basado en normas, previsible y no discriminatorio”.
El Jefe del Estado es proclamado Emperador por el congreso extraordinario del MESAN, mientras que la Asamblea Nacional está compuesta de diputados elegidos que gozan de todas las inmunidades.
Los últimos años se han caracterizado por la celebración de reuniones paralelas simultáneamente con los períodos de sesiones, y por la presencia de Jefes de Estado y otros dignatarios.
Buscamos el mismo equilibrio cuando recomendamos a nuestros Jefes de Estado y de Gobierno que adoptaran medidas claras para garantizar un comercio internacional más equitativo y más favorable al desarrollo.
Cardenal Sodano (Santa Sede) (habla en francés): Tengo el honor de transmitir los cordiales saludos del Papa Benedicto XVI al Copresidente y a los Jefes de Estado y de Gobierno reunidos aquí.
Nuestros Jefes de Estado o de Gobierno decidieron ratificar el papel central del Consejo de Seguridad como órgano que tiene la responsabilidad primordial en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.
Otro elemento fundamental que consideramos importantísimo y que querríamos que se materializara cuanto antes es el de la decisión de nuestros Jefes de Estado o de Gobierno de constituir una fuerza policial permanente.
Durante el actual período de sesiones, que coincide con el sexagésimo aniversario de las Naciones Unidas, debemos ocuparnos de la dinámica visionaria que nos han infundido nuestros Jefes de Estado o de Gobierno.
Han transcurrido cinco años desde que los Jefes de Estado o de Gobierno aprobaron la Declaración del Milenio aquí, en la Asamblea General, comprometiéndose así a cumplir los objetivos de desarrollo del Milenio.