El alquiler de este piso y todos los muebles que en él hay están pagados hasta la última peseta; no he engañado a nadie para ello y nada debo en ningún sitio.
Yo no me he alterado en oír que ando como cuerpo fantástico por las tinieblas del abismo, ni por la claridad de la tierra, porque no soy aquel de quien esa historia trata.