La mayoría de ellos, sin embargo, en España, tienen un tono como infantiloide que me molesta, como si estuviesen hablando a niños o a personas con poco juicio.
Estamos golpeados por todos los frentes y en ese contexto creo que es un presidente que ha demostrado no tener serenidad y una falta de sensatez absoluta, sino más bien un tipo muy visceral.
Pero, además, en la adolescencia, durante el sueño, es cuando se produce una serie de cambios neurocerebrales muy importantes: el desarrollo del lóbulo prefrontal, que es el que nos va a dar el juicio.
Entonces, la fortaleza que yo hoy tengo de la gente que me rodea es porque crecí viendo gente increíble en mi familia y eso me permite hoy darme cuenta: " Esta persona creo que no la quiero tener cerca" .