Además, todavía subsistían varios obstáculos jurídicos y administrativos para los inversores extranjeros, lo que reducía el potencial del país para atraer IED.
Algunos participantes mencionaron la importancia de modernizar el clima de inversión en Argelia y hacerlo más accesible a los inversores de habla inglesa.
Por lo general, las corrientes de inversión extranjera directa se han visto influenciadas por políticas que no discriminan entre inversores extranjeros y nacionales.
Estas normas pueden variar en diferentes países, por lo que la información sobre esas cuestiones será muy útil para los inversores, y especialmente los extranjeros.
También reconoció que los cambios en las tenencias de acciones de los grandes inversores debían comunicarse al mercado tan pronto como la empresa los conociera.
La participación de inversores extranjeros en esos mercados significa que no se eliminan los riesgos de un giro abrupto en las corrientes de capital extranjero.
Para poder adoptar con conocimiento de causa una decisión sobre la empresa, los inversores tienen que poder disponer de información sobre la composición del capital social.
Con el aumento de la competencia por captar este tipo de inversiones, es importante desarrollar un programa atractivo que coincida con las necesidades de los inversores.
Las obligaciones soberanas, como por ejemplo, los bonos son frecuentes en los mercados de capitales y demuestran que la demanda y la confianza de los inversionistas son grandes.
Si bien esta práctica sigue siendo controversial, los inversores la toleran en la medida en que se hagan públicas las diferencias existentes en cuanto al derecho al voto.
En cuanto a las estrategias de promoción de las inversiones, los organismos de promoción de las inversiones se centran principalmente en los inversores situados en los países desarrollados.
Las pequeñas y medianas empresas (PYME), tradicionalmente consideradas como el motor del crecimiento económico en los países en desarrollo, tienen dificultades para atraer inversionistas y acceder a la tecnología.
El inversionista, al contratar un crédito en que el riesgo es menor exige una “prima de riesgo” más baja y se reduce el costo del préstamo para el prestatario.