La comunidad internacional debe exigir a Israel que explique cómo la anexión de territorios y el establecimiento de asentamientos constituyen defensa propia.
En Colombia, tanto el grupo insurgente FARC como la organización paramilitar de derecha Autodefensas Unidas de Colombia participan en el tráfico de drogas.
Dado que respondemos luchando en legítima defensa, dicen que nuestras acciones —las suyas y las nuestras— son equivalentes desde el punto de vista moral.
Las amenazas inminentes están plenamente previstas en el Artículo 51, que salvaguarda el derecho inherente de los Estados soberanos a defenderse de un ataque armado.
Esos grupos no son lamentablemente los únicos que cometen extorsiones, ya que también lo hacen otros grupos armados ilegales, simplemente denominados “guerrilleros” en el informe.
Sin embargo, una opinión consultiva podría arrojar luz sobre el debate sobre el empleo preventivo de la fuerza en el ejercicio del derecho de legítima defensa.
Se afirmó que ello podría hacerse concentrándose en cuáles serían los efectos en los tratados de la agresión o la defensa propia, sin definir esos actos.
Varios fallos de la Corte Internacional de Justicia en diversas causas han recalcado que las medidas de legítima defensa sólo son legítimas tras un ataque armado.
Los que estaban allí, le dijeron que el animal había mordido al muchacho y que este,al defenderse, lo había matado golpeándole la cabeza con una piedra.
El corazón se me apretó cuando pensé que toda mi pólvora podía arruinarse de un soplo, puesto que toda mi defensa y mi posibilidad de sustento dependían de ella.
Bien es verdad que en lo que tocare a defender mi persona no tendré mucha cuenta con esas leyes, pues las divinas y humanas permiten que cada uno se defienda de quien quisiere agraviarle.