Los partos atendidos por matronas tradicionales y la absoluta falta de higiene y de precauciones a menudo ponen en peligro la salud de las mujeres y de los recién nacidos.
Se entretuvo una media hora conversando con las matronas negras, sentadas como ídolos monumentales frente a las baratijas de artesanía expuestas en el suelo sobre esteras de yute.
En un tiempo se supo que no tenía una residencia fija, que criaba gallos en casa de Pilar Ternera, y que a veces se quedaba a dormir allí, pero que casi siempre pasaba la noche en los cuartos de las matronas francesas.
En el otro mulo, que llevaba el baúl de la viuda y algunos encargos, Blasillo iba detrás muy respetuoso y sin atreverse a hablar a la adusta y floreciente matrona cuya custodia le había confiado su abuelo.
También hace falta más personal ginecológico. Por ejemplo, En Noruega hay 218 médicos, enfermeras y matronas por cada 10.000 habitantes. En Somalia, uno por cada 10.000
La madre esté rodeada del personal adecuada durante el embarazo y parto. Una de las grandes carencias que hay en estos momentos es la capacidad de tener más matronas.
No es suficiente tener hospitales y grandes matronas, si las madres no acuden, siguen dando a luz en casa y si las chicas jóvenes dan a luz solas o en condiciones de clandestinidad.