Así que no desperdicien su domingo escuchándonos, vayan a ver una de las películas de duro de matar en televisión, siempre las pasan y siempre son buenas.
Figurines, revistas de moda extranjeras. Doña Manuela las tenía por docenas; cuando iban quedándose viejas nos las regalaba y yo me las llevaba a casa, nunca me cansaba de mirarlas.